Dodge ha escuchado a los entusiastas y ha dado un paso atrás en su estrategia eléctrica: el muscle car de gasolina no ha muerto. Tras el lanzamiento del Charger EV, que no logró conquistar el mismo fervor que los clásicos V8, la marca ha anunciado la llegada Dodge Charger Sixpack, una nueva generación de muscle cars con un motor turboalimentado de seis cilindros en línea.
Este nuevo modelo mantendrá las opciones de carrocería del Dodge Charger eléctrico: carrocería sedán de cuatro puertas ocoupé de dos puertas, pero bajo el capó habrá un 3.0L Hurricane Twin-Turbo, el mismo que ya ha demostrado su potencial en la Ram 1500 RHOEl Dodge Charger Sixpack llega en dos versiones, ambas con tracción total (AWD) estándar pero con la opción de cambiar a tracción trasera (RWD) para quienes prefieran el estilo clásico: Han anunciado dos variantes del Sixpack para el mercado norteamericano:
- Charger Sixpack R/T: 420 CV (309 kW) por un precio estimado de menos de 50.000 $. Tiene la Configuración Standard Output (S.O.) del motor Hurricane 3.0L Twin-Turbo.
- Charger Sixpack Scat Pack: 550 CV (404.5 kW) por un precio estimado inferior a 55.000 $. Configuración High Output (H.O.), con mayor presión de turbo y mejor entrega de par (más del 90% del par disponible entre 3.000 y 6.000 rpm).
Entre la tecnología que equipa, el Line Lock, que permite hacer burnouts con solo presionar un botón (sin necesidad de dominar el freno manual), el Launch Control para acelerar de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y completar el cuarto de milla en 12.2 segundos. También cuenta con un escape activo de doble modo para recuperar el rugido clásico que el Charger EV no pudo replicar con sus simulaciones.
Aunque comparte plataforma con el Charger eléctrico, el Sixpack introduce cambios para adaptarse al motor de combustión. Entre ellas, un capó rediseñado para alojar el turbo seis en línea, una parrilla delantera más grande para mejorar el flujo de aire o las salidas de escape reales (en lugar de difusores estilo EV).
¿Por qué un seis en línea y no un V8?
Para los puristas, nada reemplazará el Hemi V8, pero el Sixpack demuestra que la era de los muscle cars de gasolina aún no termina. Dodge ha optado por el 3.0L Hurricane en lugar de resucitar el Hemi V8 (que sí regresará en la RAM 1500 y Durango). Se hace para ganar eficiencia sin sacrificar potencia, además de tener un coste de producción menor, permitiendo precios más competitivos frente al Charger eléctrico.
Sin duda, el Dodge Charger Sixpack mantiene el espíritu muscle con escapes rugientes y opción de porpulsión. Ofrece más potencia que muchos V8 clásicos y además resulta más económico que el Charger EV, apuntando a un público más amplio. Llegará a los concesionarios a finales de 2025.
Fuente: Dodge