Durante este pasado mes de julio ha cumplido 40 años de vida una de las sagas más longevas y exitosas de la historia del automóvil, la Serie 3 de BMW. A medidos de la década de los 70 del pasado siglo la marca bávara fue pionera al lanzar al mercado un, por entonces, revolucionario concepto de berlina compacta deportiva y tal ha sido su éxito que, durante estos 40 años, se ha convertido en la berlina premium más vendida del mundo.

El estreno mundial de la primera generación del BMW Serie 3 (E21) tuvo lugar en julio de 1975, siendo presentado en el Estadio Olímpico de Múnich. Desde el principio ya destacaba por su afilada silueta, por la propulsión trasera, el excelente reparto de pesos entre ambos ejes, un chasis a la altura de las circunstancias y, por ende, una deportividad hasta ese momento no vista entre las berlinas de su tamaño, aunque sin renunciar a la practicidad del uso diario. De una forma u otra estas características han permanecido vigentes, como señas de identidad de la Serie 3, hasta nuestros días.

BMW_M3_30_Aniversario_008Pero, aunque el dinamismo era una de sus características más destacadas, hubo que esperar hasta la segunda generación del Serie 3 (E30), que se lanzó en 1983, para encontrar una versión que pudiéramos considerar como auténticamente deportiva: sí, lo has adivinado, se trataba del BMW M3. Y desde ese momento cada una de las siguientes generaciones ha tenido su correspondiente versión desarrollada por BMW Motorsport GmbH, para deleite de todos sus seguidores.

Y es precisamente de estas variantes más radicales y fascinantes de las que vamos a realizar un profundo repaso, a continuación, con motivo de su trigésimo aniversario:

1ª generación: BMW M3 E30 (marzo 1986 / marzo 1990)

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El BMW M3 nació en 1985 ante la necesidad de homologar al menos 5.000 unidades, para que la marca alemana pudiese competir en los cada vez más populares campeonatos de turismos en circuito y también en rallies, dentro de la reglamentación de Grupo A (vehículos de producción) de la FIA, una vez se decretó la desaparición de los espectaculares y míticos Grupo B.

Fue presentado en el Salón de Frankfurt, en septiembre de 1985, llamando la atención no sólo por el potencial mecánico, sino por su estética, donde destacaba el spoiler en la parte baja del paragolpes delantero, los faldones laterales pero, sobre todo, el alerón posterior y los abultados pasos de rueda, que le otorgaban un aspecto mucho más radical que el resto de versiones de la berlina.

En un principio se iban a construir únicamente los ejemplares obligatorios, pero fue tal su éxito que cuando finalizó la producción de esta primera generación del M3 se habían vendido casi 18.000 unidades (concretamente 17.970 ejemplares, de los que 786 correspondían a la carrocería descapotable).

El propulsor se engendró por un encargo al departamento técnico de BMW Motorsport GmbH, que lo tuvo listo en apenas 2 semanas, y que tomó como base el bloque de 2 litros heredero directo del que sirvió a la marca alemana (motorizando a la escudería Brabham) para ganar el Campeonato del Mundo de Fórmula 1 en el año 1983, con Nelson Piquet.

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El 4 cilindros en línea (código S14), de disposición longitudinal, contaba con una cilindrada de 2.302 centímetros cúbicos, doble árbol de levas en cabeza, 4 válvulas por cilindro y un avanzado sistema de inyección Bosch ML-Motronic para entregar una potencia de 200 CV a 6.750 rpm y un par máximo de 240 Nm a 4.750 rpm.

Con semejantes cifras era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos, cubrir el kilómetro desde parado en 27,2 segundos y lograr una velocidad punta de 235 km/h, para un vehículo que pesaba apenas 1.200 kg en la báscula.

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La caja de cambios manual era una Getrag de 5 relaciones con una primera velocidad que se engranaba hacia atrás (otro de sus rasgos característicos), encargándose de transmitir la potencia al eje trasero, en el que se montaba un eficaz diferencial autoblocante mecánico.

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Para algunos mercados se desarrolló una versión de este mismo propulsor dotada de catalizador, que rebajaba la potencia original hasta los 195 CV a 6.750 rpm y el par máximo a 230 Nm a 4.750 rpm. Las prestaciones también sufrían un ligero retroceso, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos, cubría el kilómetro desde parado en 27,6 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 230 km/h.

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Pese al indudable éxito inicial, y de cara a aumentar su competitividad en los diversos campeonatos en los que tomaba parte, se desarrollaron versiones mejoradas (o, mejor dicho, “evolucionadas”), con actualizaciones del propulsor y aerodinámicas, para lo cual era necesario homologar al menos 500 unidades:

BMW M3 Evolution I

  • Incorporaba pequeñas mejoras en el motor (principalmente en la culata).
  • Idéntico rendimiento (potencia y par) que la versión estándar.
  • Se produjeron 505 unidades.

BMW M3 Evolution II

  • Conjunto de “evoluciones” a nivel de propulsor (pistones, admisión, volante de inercia aligerado…), electrónica, trenes rodantes, etc.
  • Utilizaba un propulsor (sin catalizar) que aumentaba su potencia hasta los 220 CV a 6.750 rpm y el par máximo a 245 Nm a 4.750 rpm.
  • La aceleración de 0 a 100 km/h la lograba en 6,7 segundos, realizaba el kilómetro desde parado en 27,1 segundos y la velocidad punta era de 243 km/h.
  • También un aumento en el tamaño de las tomas de aire delanteras o la inclusión de un spoiler trasero adicional sobre la tapa del maletero.
  • Se fabricaron un total de 501 unidades.

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BMW M3 Sport Evolution

  • Se trataba de la versión que incorporaba un mayor número de mejoras y modificaciones.
  • Exteriormente destacaba por el spoiler delantero y el alerón trasero con extensiones ajustables para mejorar la carga aerodinámica.
  • La suspensión se endureció y rebajó en 10 mm frente a la versión estándar.
  • El propulsor (catalizado) aumentó su cubicaje hasta los 2.467 centímetros cúbicos para ofrecer 238 CV de potencia a 7.000 rpm y un par máximo de 240 Nm a 4.750 rpm.
  • Aceleraba de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos, recorría el kilómetro desde parado en 26,7 segundos y la velocidad máxima alcanzaba los 248 km/h.
  • Se produjeron 600 unidades.

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También se desarrollaron diversas ediciones conmemorativas:

  • BMW M3 Tour de Corse edition: 50 unidades, que tomaban como base el BMW M3 Evolution I, para celebrar la victoria en el rallye de Córcega de 1987, a manos del piloto francés Bernard Béguin.
  • BMW M3 Europameister edition: 148 unidades, basadas en la versión estándar, para conmemorar su dominio en el Campeonato de Turismos en el año 1988.
  • BMW M3 Cecotto edition: 480 unidades fabricadas a partir del BMW M3 Evolution II para conmemorar las victorias del piloto venezolano Johnny Cecotto.
  • BMW M3 Roberto Ravaglia edition: 25 unidades que, idénticas a la anterior, sirvieron para homenajear al piloto italiano Roberto Ravaglia.

BMW_M3_E30_008En el año 1988 vio la luz el BMW M3 Cabrio que combinaba la planta motriz, esquema de suspensiones, transmisión y la mayoría de los elementos de la carrocería de la versión coupé, con el “techo abierto” ya visto en el Serie 3 E30 descapotable.

Se ofreció con tres variantes de las motorizaciones anteriormente descritas: el propulsor estándar de 200 CV, el catalizado de 195 CV y el también catalizado de 215 CV.

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Sobre la excepcional base del modelo de calle, las versiones de competición de esta 1ª generación del BMW M3 alcanzaban los 300 CV de potencia (aunque algunas llegaron hasta los 360 CV) y sus éxitos fueron innumerables: desde el Campeonato del Mundo de Turismos (WTCC), pasando por diversos campeonatos nacionales, entre los que destaca sobremanera el conocido DTM alemán, e incluso victorias en el Campeonato del Mundo de Rallies, como la que se consiguió en el rallye de Córcega del año 1987, que fue la primera de BMW en esta modalidad después de 14 años.

Aún hoy sigue siendo uno de los modelos más laureados de todos los tiempos en el ámbito de la competición, quizá sólo por detrás de otro mito como el Porsche 911.

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